Alice Ball: Genio Olvidado

Alice Ball: Genio Olvidado

4 de agosto de 2023

INNOVACIÓN DETERMINACIÓN LEPRA INJUSTICIA RECONOCIMIENTO
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Bienvenidos a un nuevo episodio de BiografIA, el podcast donde exploramos las vidas de personalidades icónicas que han dejado una huella imborrable en la historia. Hoy nos adentramos en la vida y obra de Alice Ball, una brillante científica cuyo trabajo cambió para siempre la lucha contra la lepra.

Alice Augusta Ball nació el 24 de julio de 1892 en Seattle, Estados Unidos. Desde pequeña mostró un interés notable por las ciencias, inspirada por su abuelo, uno de los primeros fotógrafos afroamericanos en documentar la historia del Oeste americano. Este amor por la ciencia la llevó a la Universidad de Washington, donde se graduó en farmacia y luego obtuvo una maestría en química.

En 1915, Alice se convirtió en la primera mujer y la primera persona afroamericana en obtener un máster en la Universidad de Hawái. Fue allí donde realizó la investigación que cambiaría el curso de la medicina: el tratamiento de la lepra, una enfermedad que había afectado a la humanidad durante siglos.

La lepra, también conocida como enfermedad de Hansen, es una infección bacteriana que afecta principalmente la piel y los nervios. Durante mucho tiempo, los pacientes de lepra fueron marginados y enviados a colonias de leprosos debido al temor y el estigma asociados con la enfermedad.

Antes de Alice, el principal tratamiento para la lepra era el aceite de chaulmoogra, pero este tenía graves inconvenientes. Era extremadamente viscoso y difícil de aplicar sobre la piel o de inyectar en el torrente sanguíneo. Además, provocaba efectos secundarios severos.

Aquí es donde entra en juego el genio de Alice Ball. Ella desarrolló un método para purificar el aceite de chaulmoogra y convertirlo en éteres solubles que podían ser inyectados sin causar daño. Su tratamiento fue tan efectivo que se utilizó durante más de dos décadas hasta que aparecieron los antibióticos.

Sin embargo, la historia de Alice Ball no está exenta de tragedia. Murió a la temprana edad de 24 años, antes de poder ver el impacto duradero de su trabajo. Y peor aún, durante muchos años, su contribución fue ignorada y su método fue atribuido erróneamente a otro científico.

No fue hasta 2000 cuando la Universidad de Hawái finalmente reconoció su trabajo, nombrando un premio y un día en su honor. En 2020, la historia de Alice llegó a la Casa Blanca, donde fue honrada con un retrato en la Galería Nacional de Retratos.

La historia de Alice Ball es un recordatorio de que la grandeza a menudo pasa desapercibida, y de que la verdadera medida de un logro no siempre se refleja en el reconocimiento inmediato. Nos recuerda la importancia de buscar la verdad, de dar crédito donde se debe, y de celebrar a aquellos cuyas contribuciones han sido olvidadas o pasadas por alto.

Gracias por acompañarnos en este viaje a través de la vida de Alice Ball, una mujer cuyo legado sigue vivo en cada paciente de lepra que ha recibido tratamiento gracias a su innovadora investigación. Nos vemos en el próximo episodio de BiografIA. Hasta entonces, sigamos descubriendo juntos las historias ocultas detrás de las grandes figuras de nuestra historia.